Entorno Natural
A un viajero que se acerque a La Fregeneda por la carretera comarcal 517 de En primer lugar tiene interés la visita a la misma población.
La población de La Fregeneda ha experimentado una caída progresiva desde la década de los sesenta, al igual que las otras poblaciones de la comarca, situándose en 580 habitantes a comienzos de abril de 2008. Se adjuntan gráficos de población actualizados a la fecha.
La extensión del término de La Fregeneda es de 44'4 km2. El término presenta tres áreas geográficas bien determinadas. La primera son las tierras de penillanura que ocupan las tierras más altas (superiores a la cota de 450 metros), hoy día las más cultivadas de sembradura. Las tierras caídas hacia el Duero presentan importantes desniveles desde la cota indicada hasta la de los 150-200 entre los que se hallan las márgenes del Duero; son tierras hoy devastadas por las llamas, que conservan algunos almendrales y olivares, aunque se cultivo mayoritario fuera hasta finales del siglo XIX y comienzos del XX la viña, hecho atestiguado por la toponimia, las muchas cepas ya silvestres por la zona y el respestabilísimo recuerdo de los mayores; predominan, a la vista, en esta zona, orientada el norte, las tierras y rocas pizarrosas con algún lugar geológicamente curioso como el Poyo Bilano. La tercera región incluye todas las tierras que faldean el desnivel desde la cota de las tierras altas hasta las márgenes del río Águeda, en cotas similares a las del Duero; esta área, también devastada por las llamas en años pasados, ofrece espectaculares y vistosos berrocales que dan nombre a parajes de la zona; destacan La Peña Redonda, la Peña el Sal y los numerosos picones de nombre ya no recordado; está surcada por la vía férrea.
El clima de La Fregeneda resulta ser mediterráneo. En las tierras altas hiela en invierno pero en los valles, hondonadas y encajonamientos se encuentran temperaturas muy suaves en invierno y muy calurosas en verano. Las lluvias tienen el régimen propio de la zona y son muy raras las nevadas.
Los abundantes arroyos tienen régimen estacional de modo que no suelen correr en verano, y sí en otoño, verano y primavera. Los de mayor tramo y caudal son el Arroyo de las Almas (flanqueado por la carretera que conduce al Muelle de Vega Terrón) y el Arroyo Lugar.
La retención del agua pluvial en charcas es escasa por lo accidentado del terreno; sin embargo hay varios abrevaderos llamados caños (de Las Palomas, Caño Nuevo, de los Areales, de Duero, de la Fuente Herrera, Charaíz, del Gato, Caño Torero, Caño de Valdanoguera, de la Fuente del Espino, Caño Cuquín, del Pozo de las Eras) y numerosas fuentes (destacan entre ellas la de la Maílla, la Arquita, Pozarriba, Pozabajo, Fuente Olvidera, de Valdatorre, Fuente Gamita, de Santa Olalla, etc.), muchas de las cuales son bajas, a nivel del suelo y hoy día no aptas para consumo humano. Algunas conservan agua incluso en los más duros y secos veranos.